martes, 17 de febrero de 2009

Fan Fiction de Israel: 5ª Continuación Capítulo 6x01

Sabéis que muchas veces me he quejado de que en la serie nunca nos contaron por qué finalizó la relación de Skills y Bevin. Me gustaba mucho la pareja, eran muy divertidos y se compenetraban a la perfección. Puede que la serie no me dé la respuesta que estoy buscando, pero mientras tanto me quedo con la versión de Israel. En esta parte de su fanfic, nos relata, bajo su punta de vista, qué pudo ocurrir con ellos. A ver que os parece a vosotros.

Como dirían en muchas series, Previously on One Tree Hill:

Israel lleva ya un tiempo escribiendo este fanfic, por eso es posible que no os acordéis de todo. Os aconsejo que repaséis las siguientes partes:

3ª Parte: Jamie y Skills
9ª Parte: Nathan
11ª Parte: Haley

Ahora que ya os habéis puesto al día, podéis leer la siguiente parte del Fan Fiction. Os lo garantizo, cubre muchas lagunas que ha dejado la serie.

12ª Parte: Skills

La luz de la cocina se apaga de súbito tras un chispazo. Deja caer una sartén que se estrella contra el suelo y ahoga un grito bajo el estruendo. Una sonrisa nerviosa escapa de su boca y no puede evitar volver a sentirse como una tonta. "Otra vez se han fundido los plomos, otra bombilla rota y otra cena echada a perder", se lamenta a la vez que presiente cómo, otra vez, dejará ese problema en su inacabable lista de asuntos pendientes como si de esa forma pudiera arreglarse por su cuenta.

Se desplaza a tientas por la cocina hasta que su mano encuentra el pomo de un cajón. Lo abre y saca de él una pequeña linterna con la que consigue iluminar tenuemente la estancia. Contempla durante un instante el desastre dibujado en el suelo. "Cuando mi madre hacía estas cosas todo parecía mucho más fácil".

Se encamina hacia la caja de fusibles. La persiana está medio bajada y algo de luz de la calle se cuela en el salón. Una sombra en la ventana llama su atención; una pequeña silueta cariñosamente familiar. Se acerca enfocándole con la linterna y aunque pronuncia su nombre un par de veces, el rostro del niño está perdido en algún lugar al otro lado de la ventana. Su boca dibuja una pequeña o. Ni siquiera pestañea. Cuando llega a su lado posa una mano sobre su hombro. Quiere preguntar qué sucede pero la imagen al otro lado de la ventana atrae su mirada como un imán. Tarda un poco en asimilar lo que esta sucediendo. Balbucea unas palabras cuyo significado el niño apenas logra entender y sale corriendo a la calle como alma que lleva el diablo.

********

-¡Nathan! ¿Qué estas haciendo? ¡Para! ¡Para!

Sus manos luchan por apartar el cuerpo sudoroso de Nathan. Apenas la escucha sumido en su propia furia y sus intentos por separarlos son inútiles. Grita histéricamente y se siente impotente, casi al borde del llanto. La aparta violentamente de un manotazo y cae al suelo. Es sólo entonces, al desviar la mirada, cuando parece que empieza a entrar en razón y suaviza el gesto de su cara aunque no la dureza de sus ojos. Se incorpora lentamente, sin ser capaz de sentir ninguna satisfacción por lo que acaba de hacer. El cuerpo de Skills permanece encogido, inmóvil. Sus ojos están cerrados y parece inconsciente.

Ella corre hacia él. Repite una y otra vez su nombre. Apoya la cabeza en su regazo. Saca un pañuelo de papel tratando torpemente de limpiar la sangre. Se sorprende al descubrir cómo sus propias lágrimas resbalan por sus mejillas y caen en el rostro de Skills. No sabe cuanto tiempo permanecen así en la penumbra de la calle donde únicamente se escuchan sus sollozos.

Nathan se mantiene a su lado, inmóvil. Por un lado la rabia le consume cuando recuerda la imagen de su madre en la cama con Skills, pero por otro, le asusta volver a descubrir lo que es capaz de hacer cuando deja correr libremente su odio. Creía que después del accidente, después de todo ese tiempo en la silla de ruedas, había aprendido a controlar su carácter, pero no… Y ahora, en ese momento, sólo desea no haber hecho algo de lo que se vaya a arrepentir el resto de sus días.

El cuerpo de Skills se agita y tose violentamente. Ella lo agarra más fuerte abrazándolo contra su cuerpo. Abre los ojos y la contempla, perplejo.

- ¿Bevin? – pregunta con un débil hilo de voz. Ella asiente reprimiendo las lágrimas.

Sin dar explicaciones Nathan da media vuelta y se aleja perdiéndose entre las sombras de la calle.

********

Apenas ha conseguido estabilizar el ritmo de su respiración. Recostado sobre el respaldo en el extremo del sillón, nota cómo su cara parece hincharse a cada segundo y cómo un intenso pinchazo atraviesa su costado cada vez que intenta volver a incorporarse. Sin embargo, todos esos dolores parecen lejanos, oprimidos por otro que se levanta de pie ante él, al otro lado de la habitación, alimentado de recuerdos. Una especie de guerra de miradas comienza entre ambos. Intenta que la suya sea intensa, fuerte, libre del sufrimiento que en esos años nunca ha sido capaz de acallar. Es tan difícil contemplar esos ojos sin volver a perderse en ellos, sin caer en el hechizo que le embrujó hace años… Es tan difícil no volver a recordar aquella historia que se juró olvidar… Es tan difícil odiarla cuando su gesto sólo dibuja una sincera preocupación y quizá un atisbo de culpabilidad…

- ¿Qué ha pasado ahí fuera? – le pregunta rompiendo el silencio -. ¿Por qué Nathan te estaba pegando?

Emite un gruñido en forma de respuesta. Su mirada se vuelve más resentida. El rencor le invade. Bevin duda durante unos segundos. Finalmente, se acerca a su lado.

- ¿Te duele? – musita con un hilo de voz. Skills se sorprende al descubrir que su cuerpo tiembla y que al igual que él, está muy nerviosa, sin saber bien qué hacer, ni qué decir, ni cómo actuar.

- Estoy bien – contesta sin mirarla -. Creo que lo mejor será que me vaya a casa. Gracias por…

No puede terminar la frase. Una gigantesca punzada de dolor le obliga a volverse a sentar y se lleva una mano al costado.

- No, no estás bien – le mira y tras un gesto dubitativo añade -. Llamaré a una ambulancia.

********

Fiesta. Una marea de cuerpos jóvenes bailando al ritmo de la música que retumbaba en los altavoces en una atmósfera de risas, humo y sudor. En las barras los camareros volaban frenéticamente de un lado a otro llenando vasos con hielo y alcohol. Era sábado por la noche. Hacía tanto tiempo que no salía con las chicas. Le trajo infinidad de recuerdos: partidos de baloncesto, concursos de animadoras, bailes… Esa noche se había convertido casi sin querer en una vuelta atrás hacia los días de instituto quedados atrás y que a veces secretamente tanto añoraba. Pero esa noche era "la noche". Estaban casi todas allí, todo el grupo de animadoras con el que durante tanto tiempo había compartido risas y secretos. Demasiado tiempo sin haberse visto. El comienzo de la universidad había disgregado ese grupo, pero esa noche, después de casi tres años, se reunía de nuevo. Sin embargo, echaba de menos a Brooke, a quien su trabajo la tenía totalmente absorbida como para permitirse un pequeño fin de semana de vacaciones y a Rachel, que a pesar de haber prometido volver a Tree Hill para la ocasión, todavía no había hecho acto de presencia.

Pero poco importaba eso entonces. Era la noche de salir, de reír, de divertirse, de saltar, de gritar, de hablar de chicos, de beber… Las copas comenzaban a subirse a su cabeza, su vista se volvía borrosa y cada vez era más difícil articular correctamente las palabras. La risa no desaparecía de su boca, especialmente cuando algún grupo de chicos se volvía para bailar junto a ellas. Se sentía feliz, como no se había sentido desde hacía bastante tiempo. Bevin no se arrepentía de su vida junto a Skills, pero no podía evitar desear muchas de las ventajas de la vida de soltera y divertirse sin ninguna otra preocupación.

Estaba sumergida en la mezcla de música y alcohol cuando la vio. Apoyada en la barra, con un vaso de tubo en la mano, estaba Rachel, como siempre deslumbrante, hablando esporádicamente con un hombre a su izquierda. Se aproximó a ellos esquivando a la multitud despreocupada que se abría y cerraba a su paso.

- ¡Rachel! – chilló mientras saltaba a su cuerpo abrazándola -. ¿Qué tal estas?

Empezó a hablar atropelladamente y Rachel sólo era capaz de mirarla con una media sonrisa en su boca y gesto de incomodidad. En una pausa señaló a su compañero que saludó a Bevin con un breve movimiento con la mano. El resto de chicas del grupo se acercó ruidosamente, cubrieron a Rachel de besos y abrazos, y antes de que se pudiera dar cuenta, estaba siendo arrastrada entre la gente para bailar en el centro de la pista.

Bevin reía sin parar al verlo, hasta que se volvió de nuevo al acompañante de Rachel.

- ¿No quieres una copa? – preguntó tratando de iniciar una conversación.
- No. Hace mucho tiempo que no bebo – respondió lacónico.

Frunció el ceño. Bevin se dio cuenta de que la pregunta le había incomodado. Decidió no seguir hablando y extendiendo el brazo sobre la barra pidió al camarero un vodka con limón. Esperó unos segundos bailando distraída mientras el chico daba la impresión de encontrarse un poco inquieto en aquella discoteca. Cogió el vaso y con un breve ademán le indicó que se iba. Al llegar a la altura de las chicas, asió el brazo de Rachel y le comento al oído:

- Tu chico es muy guapo, pero habla muy poco.
- Bueno, supongo que estará cansado. Él – se detuvo un segundo antes de terminar la frase -, nunca ha sido muy de discotecas.
- ¿Cuánto tiempo lleváis juntos?
- No se si se podría considerar que estamos juntos…
- ¿Entonces?
- Es una historia muy larga. Te la cuento otro día.

El DJ cambió a una canción más rápida tapando sus voces. A partir de entonces la realidad se fue nublando. El alcohol siguió viajando por sus venas subiendo hacia su cerebro y no fue hasta la mañana siguiente cuando comprendió, muy a su pesar, todo lo que había ocurrido esa noche.

********

El estupor se dibujó en su rostro cuando el médico le mostró el niño. Lo miró nervioso como si lo que le enseñaba fuera parte de una broma. Él le devolvió la mirada con cierta incomodidad. Casi creyó leer cierta lástima en ella. Sus ojos viajaron hacia Bevin que trataba de recuperarse. Cuando pudo contemplar a su hijo recién nacido, el miedo se plasmó en sus facciones. No necesitaba más explicaciones. La traición invadía su cuerpo. Volvió a examinar al niño brevemente, necesitando decirse a sí mismo que aquello no era verdad. Acalló un grito furioso en su boca y se marcho de la sala ciego de ira.

Pasaron días en los que nadie pudo localizarle. Apagó el teléfono y cogió el coche. Quería huir de allí, alejarse lo más posible de Tree Hill. Pero el paso de los kilómetros no podía distanciar su mente de la cruel verdad. Condujo atravesando pueblos sin rumbo fijo. Algunas noches las pasó aparcado sobre la maleza, lejos de la civilización, pidiendo respuestas a la noche estrellada. ¿Por qué le había engañado de esa manera? ¿Quién era el verdadero padre del niño? ¿Cuándo había sucedido? ¿Por qué lo había ocultado hasta el momento en que la mentira saliera a la luz por sí misma? Otras noches lloraba de rabia hasta que el sueño lo atrapaba para despertarle más tarde con constantes pesadillas. A veces dirigía su vista a las cunetas y pensaba lo fácil que sería terminar con su sufrimiento dirigiendo el coche en esa dirección.

Todo se había roto. Durante unos meses su vida se había convertido en realizar los preparativos para la llegada de su hijo. Toda la ropa, la cuna, los pañales, los juguetes… Se sorprendía del entusiasmo que ponía al realizar todas esas laborales. Fantaseaba con una casa en la que vivieran los tres juntos. Incluso había aparcado sus estudios para encontrar un trabajo que les permitiera salir adelante sin las ayudas de sus padres. Y ya no había nada. Su hijo ya no era su hijo. Era el hijo de otra persona. De cualquier otra persona. Y Bevin… no podía pensar en ella sin ahogarse en el odio. Sabía que a partir de ese momento la había perdido para siempre. El lazo de confianza que los unía se había quebrado y ya no podía ver en ella sino a una persona egoísta y cruel con la que nunca podría volver.

Cuatro días después de abandonar Tree Hill, volvió a encender su teléfono móvil. Enseguida comenzaron a agolparse los mensajes y los avisos de llamadas, destacando en especial los continuos intentos por parte de Bevin. Sopesó por un instante la opción de llamarla y descargar toda su rabia por teléfono. Sin embargo, se decidió a hacer lo que pensaba que era más correcto.

Skills volvió a Tree Hill con la firme decisión de enfrentarse a Bevin en persona, gritarle todo lo que pensaba de ella a la cara y hacerle contestar una a una todas las preguntas que se agolpaban en su mente.

********

Cuelga el teléfono, tensa. No es posible controlar sus emociones. Verle allí tirado en el suelo ha despertado al mismo tiempo sentimientos de disgusto y de nostalgia. Sigue queriéndole. Hay cosas que el recuerdo no consigue olvidar y más cuando la causa vive contigo y te saluda todas las mañanas con una sonrisa. Pero Skills todavía la culpa. Lo puede ver aún en su expresión hosca y seria. Sus ojos negros caen sobre ella acusándola y ella sólo es capaz de empequeñecerse, sin posibilidad de ofrecer una replica. Sólo arrepentimiento.

Regresa al salón. Recibe una mirada fría que pretende sin éxito ser indiferente. Se sienta desganada en una de las sillas.

- Dicen que vendrán en unos quince minutos – le informa.

Skills asiente levemente sin mudar su rostro. No parece que tenga intención de pronunciar más palabras que las necesarias. Ella puede comprender que la odie, que decidiera que después de aquello sus vidas tomaran caminos separados, pero la duele especialmente que después de todo lo vivido juntos no quede nada absolutamente entre ellos.

- ¿Es que no vas a decir nada? – añade con frustración. Skills se detiene a pensar cuidadosamente sus palabras.
- Prefiero no tener que discutir – contesta.
- ¿Nunca va a ser diferente verdad? ¿No vamos a poder ser amigos?
- Ya sabes la respuesta.

********

Se despertó con la boca pastosa y la lengua pegada al paladar. La cabeza le dolía como si alguien por dentro estuviera dando martillazos. Con dificultad abrió los ojos que se entrecerraron con el resplandor de la luz de sol en la calle. Yacía en la cama con las sabanas revueltas sobre su cuerpo. Cuando se estiró su mano tocó un bulto a su izquierda. Palpó la silueta que se encontraba a su lado oculta en la cama. Retiró las sabanas con cuidado y lo que vio la horrorizó. Pegó un grito de desconcierto. No lo podía creer. La persona que estaba a su lado, recién despertada por su chillido, era Tim.

Cubrió como pudo su propia desnudez. Mientras él, cada vez más espabilado, la observaba con gesto divertido.

- ¿Qué estas haciendo aquí?
- ¿Eres de las que no les gusta que se queden a dormir? – replicó confuso.
- ¿Cómo?

Las preguntas se amontonaban en su abotargada mente. ¿Qué era lo que había ocurrido esa noche? Difícilmente se acordaba de algo. La música, las chicas, Rachel, su acompañante… Todo parecía muy difuso, irreal. Pero era posible que hubiera ocurrido…

- Dios, ¡Dime que no lo hemos hecho!
- ¿No te acuerdas?
- ¿Quieres contestarme a alguna pregunta de una vez? – preguntó con desesperación.
- Es evidente que no me he quedado aquí jugando al parchís.
- Mira – su voz se volvió amenazadora aunque en su interior estaba cerca de dejarse llevar por el pánico -. Quiero que me cuentes todo lo que sucedió anoche y que te largues de aquí en cuanto termines. Y tápate ya por favor.
- ¿De veras que no recuerdas nada? – pregunto apresurándose a ponerse los pantalones -. Anoche no parecías tan borracha.

Le lanzó una mirada furibunda que Tim supo captar para no seguir tentando su suerte.

- Anoche nos encontramos. Iba con un par de amigos y tú estabas con Rachel y otra chica rubia. No recuerdo su nombre. Te invité a una copa y estuvimos allí hasta las cuatro más o menos. Cuando estuvimos en la calle te cogías a mi cuello… El caso es que decidí que lo mejor era acompañarte a casa. Yo tampoco iba muy bien así que no puedo darte muchos detalles… No se cómo pero te me echaste encima y al final acabamos aquí. Y sí digamos que lo hicimos… lamentablemente por tu cara.

Se dejó caer sobre la cama llevándose las manos a la cabeza. ¡Qué había hecho! Y lo peor de todo era que no tenía la posibilidad de dar marcha atrás.

- Vete, por favor. Déjame sola – pidió desconsolada. Tim terminó de vestirse y antes de que saliera por la puerta añadió -: No se te ocurra contarle esto a nadie, ¿entendido? Lo que ha ocurrido aquí, queda entre nosotros dos.

********

- Y tú sabes que lo siento muchísimo, que nunca quise hacerte daño.
- Ya – contesta Skills con un bufido -. De verdad, no sigas… Estoy intentando no discutir.
- Pero…, me cuesta mucho tener que estar así.
- Lo mejor es seguir como hasta ahora.
- Te echo de menos – reconoce sin pensar en las consecuencias de sus palabras.

Se miran en silencio durante un momento. Skills se debate entre mantener la calma o volverse a dejar llevar por sus emociones. Al final su irritación se hace más fuerte.

- ¿Y qué quieres que le haga? – su silencio hace que se envalentone -. No fui yo el que ocultó durante todo el embarazo que ese hijo no era mío.
- Ni siquiera me acuerdo de cómo fue ese momento con Tim…
- Claro, cuando te diste cuenta de que no te bajaba la regla seguro que no te acordaste – añade con amargura.

¿Cómo no recordar ese día? Si parecía imposible que Skills no hubiera sido capaz de leerlo en su cara cuando le mencionó el retraso de su regla. Había llamado a Tim desesperada. Sus presagios se habían confirmado. La noche que pasaron juntos ninguno uso protección.

- No quise creer que el bebé no fuera tuyo. No se. Me engañé a mi misma.
- ¿Tienes idea de lo humillado que me sentí cuando descubrí todo? ¿Lo duro que fue?
- Yo también lo he pasado mal.
- ¡No tienes ni puta idea de lo que es pasarlo mal! – grita sin poder contener su cólera – ¿Tu eres consciente del vuelco que pego mi vida cuando me enteré de que estabas embarazada? Me hiciste vivir seis jodidos meses tu maldita mentira. Jugaste con mi vida… ¿Y pretendes que volvamos a tener algún tipo de relación?

A Skills le arde la sangre al recordar el día que volvió a Tree Hill y obligó a Bevin a que le contara toda la verdad. Ni todas las lágrimas que cayeron de sus ojos hicieron que despertara en él la más mínima compasión. No pudo perdonarla entonces y tampoco era capaz de hacerlo ahora. El dolor seguía siendo demasiado grande.

Bevin está al borde del llanto. Skills se disponia a continuar gritando cuando una pequeña figura llama su atención. Bajo el umbral de la puerta un niño pequeño les observa asustado, con un dedo en la boca.

- Nathan cariño – Bevin se arrodilla ante él -. ¿Estás bien? No pasa nada. Mamá solo esta hablando con este señor. Ven vamos a la cama.

Lo aúpa en sus brazos y lo lleva a su habitación. Skills intenta calmar sus nervios. Quiere evitar por todos los medios que se repita la misma historia. Su vida ha sido un completo desastre desde que dejó a Bevin. En ese momento, la simple idea de haberse acostado con Deb parece otra pieza rota del caos en el que se ha convertido su propia existencia. Un mundo que en ocasiones parece no tener ningún significado.

La vuelta de Bevin coincide con la llegada de la ambulancia. El timbre suena y Bevin se apresura a abrir.

- Una cosa más – se apresura a añadir Skills intentando que su voz suene calmada -. No quiero tener que repetir nunca más esta conversación, así que ahora cuando me vaya al hospital no quiero ni que me acompañes, ni que me visites, ni que me llames, ¿ok?

Bevin le escucha derrotada. Decide no poner ninguna objeción. Lo único que puede hacer es contemplar como la ambulancia se aleja mientras sus lágrimas caen entre gemidos desconsolados.

Continuará...

14 comentarios:

  1. Israel felicidades, escribes de muerte!! Que pnita la historia de Skills y Bevin, con lo divertidos q eran juntos. Espero q terminen bién!!

    No tardes mucho a escribir la siguiente entrega, toda la historia está muy interesante. Con quien se quedará Peyton? Que le pasa a Haley.
    De nuevo felicidades chico!!
    MARIA

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  2. Bueno, ya sabes que me encanta tu fanfic, estoy deseando leer el final porque mi mayor intriga es qué pasará con Peyton.

    Me gusta mucho que te centres también en personajes secundanrios y que rellenes lagunas que ha dejado la serie. Sobretodo la parte de Skills y Bevin me atormenta desde que empezó la 5ª temporada. Como he dicho en el la entrada, hasta que la serie me dé una explicación, para mí, tu versión es la que vale.

    Muchas gracias por continuar escribiendo. Espero con ganas la siguiente parte, que he oído rumores de que me va a gustar, no?

    Keep writing ;)

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  3. weno komo siempre, me ha gustado muxo tu hstoria y komo la cuentas,es un poco triste...pobrecillos...y no kreo k nathan pegara a skills :S xo esta bn todo,espero k tenga un buen final!!!

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  4. Hola!Me gustaría saber que tengo que hacer para que publiquéis un fanfic mio...hace tiempo que lo tengo escrito y me encantaría poder compartirlo con vosotros. Un saludo.

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  5. Hola!Me gustaría saber que tengo que hacer para que publiquéis un fanfic mio...hace tiempo que lo tengo escrito y me encantaría poder compartirlo con vosotros. Un saludo.

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  6. Hola Sara, puedes mandar tu Fanfic a: onetreehilloth@gmail.com y es unos días te lo publicaremos.

    Saludos!

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  7. ahhhhh!!!me ha encantado!!!y mira que normalmente soy escéptica con los fanfics, pero es que escribes muy bien! Además la historia de estos dos está muy bien hilada con los escasos comentarios que han hecho en la serie al respecto, así que ole por ti!

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  8. Por favor que continue pronto la historia estoy mas enganchada a tu fanfic que a la propia serie porque desde mi punto de vista esta temporada esta perdiendo interes me quedo con la quinta llena de drama y enredos amorosos mucho mas entretenida.

    Enhorabuena Israel!!!

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  9. increible!!!me ha encantado!no solo la historia, si no lo bien que está escrita!!utilizas recursos muy buenos, los saltos temporales que se entiemden genial, las insinuaciones que se entienden cuando has seguido la serie (el acompañante de Rachel es Owen,no?) y la verdad es que cuentas un posible final de Skills y Bevin muy triste pero muy bueno...ENHORABUENA!no nos hagas esperar mucho a la continuacion de todas las historias,porfavor!

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  10. Yo estoy completamente enganchada a este fanfic. Más que a la serie casi, igual que comentáis más arriba. Me gusta que se vean personajes de las otras temporadas, como Bevin, Tim, Jake, etc... Si en alguna de las partes apareciese Whitey, ya sería completamente feliz :)

    Por cierto... ¿vas a responder a la pregutna del acompañante de Rachel?

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  11. Muchas gracias otra vez por vuestros comentarios :). Leerlos la verdad que anima mucho para seguir escribiendo.

    Comentando por partes: Lo de Nathan pegando a Skills yo si que lo veo por dos razones. La primera porque no es tan amigo de Nathan como puede ser Lucas y la segunda, porque varias veces le hemos visto en la serie dejarse llevar por su caracter y pegarse (como al principio de la quinta).

    Yo también pienso que esta temporada está siendo peor que las anteriores. Con los fanfics estoy intentando cubrir partes que creo que nunca van a explicar de la forma que me imagino que sucedieron... además de alguna forma me gustaría "homenajear" a todos los personajes hasta la quinta con alguna aparición de una u otra manera.

    Lo del acompañante de Rachel... obviamente no lo voy a contestar. Seguid leyendo ;)

    Y por último, por no liarme más, otra vez gracias por leerlo, porque yo soy el primero que reconozco que ver un tochazo tan largo escrito da mucha pereza de leer (yo creo que ni lo leeria). Asi que nada, espero tener tiempo para seguir escribiendo y que os siga gustando

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  12. Gracias a ti por escribir el Fan Fiction y por preocuparte porque tengamos las respuestas que la serie no nos ha dado.

    A ver si podemos leer pronto la siguieente parte. ¡Sigue escribiendo!

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  13. me encanta los fanfic que escribis, estan tan bien narrados, que hace que me imagine las escenas en mi cabeza como si de la serie se tratase. yo tambien opino que el amigo de Rachel es Owen, pero no nos van a decir nada...y yo creo que mejor quedarse con la incertidumbre y seguir leyendo...
    Me encanta...seguir asi chicos, gracias a todos los que haceis posible esta pagina y todo lo que ella conlleva,vosotros haceis que ONE TREE HILL no acabe en la serie.

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  14. Israaaaaaaaaa. Da señales de vida, que llevamos mucho tiempo esperando por una continuación :)

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